Existen trucos caseros alternativos a los productos de cosmética como las mascarillas reparadoras de hidratación y nutrición hechas con productos naturales. Una pasta compuesta por un aguacate triturado y dos cucharadas de aceite de oliva, aplicada en el cabello de medias a puntas durante 20 minutos, puede reparar las puntas abiertas y mejorar la suavidad del pelo.
Cuando el cabello está frágil no conviene teñirlo con productos químicos agresivos. En estas circunstancias es mejor recurrir a una sencilla mascarilla natural para reforzar el color del pelo teñido. Los cabellos oscuros pueden usar una mascarilla de vinagre (1 taza de vinagre + ¾ taza de agua), los cabellos rubios mejoran con el líquido exprimido de un tomate y los cabellos rojizos se enaltecen con una mascarilla de aceite de uva y romero (4 cucharadas de aceite de uva + 2 gotas de aceit de romero).
Otra buena forma de sanear nuestro cabello es con un corte de pelo, ya sea cambiando radicalmente de estilo o recortando un poco las puntas si estamos a gusto con nuestro actual look. Para cortar las puntas abiertas con más comodidad, un buen truco casero es el de enrollar las puntas en pequeños mechones y cortar solo los pelos que sobresalen. En academias como CEDECO te pueden formar en el conocimiento de todas las técnicas y productos necesarios para regenerar el cabello cansado.